Río arriba a vela y motor hasta el Uruguay (¡Concepción del Uruguay!): Carnaval y Caribe entrerriano por una de las rutas fluviales históricas de la ecorregión Agua Dulce.
Navegando por aguas argentinas en tiempos de la 3ra. ola de COVID-19 / OMICRON – PERIPLO EN CUATRO ETAPAS
Etapa 2/4 – Por Rosana Actis y Sigfrido Nielsen
Desde principios del siglo XIX las aguas del río Uruguay fueron escenario de hechos históricos de importancia para nuestro país y la región. Columna vertebral del comercio de importaciones y medio de comunicación obligado, por él se desplazaban los confederados que instalaron en Concepción del Uruguay la capital nacional en tiempos de Justo José de Urquiza. ¿Cómo no querer conocerla y llegar a ella como lo hacían siglo y medio atrás quienes la visitaban… navegando río arriba?
Con ese afán iniciamos nuestro periplo. Y con la premisa de que atravesaríamos islas con playas de arena fina y blanca, como la Bonfiglio(frente a la boya del km 140) y su extenso arenal abierto, en la margen argentina del río. Para recalar luego en una hermosa ciudad provincial con pasado reluciente, sede del primer colegio laico de Argentina y del primer carnaval federal del país, con centros de aguas termales y asiento de la antigua Capitanía del Puerto (actual UTN).
Tres días duraron las tormentas eléctricas y las lluvias intensas desde que partimos de Dársena/YCPM. Esas jornadas alternamos momentos de sol y cielos más o menos borrascosos, pero las condiciones meteorológicas no eran las más propicias. Sin embargo el Caoba que es un barco marinero y conocedor de situaciones duras de navegación siguió avanzando. Anduvimos a motor esa mañana de domingo en que llegamos a Punta Gorda, KM 0 del Río de la Plata. A estribor se empezaba a ver la costa barrancosa uruguaya, y las aguas se iban haciendo cada vez más claras, menos ríos león (RDLP) o marrón (Río Paraná).
Varios amigos y principalmente Vicente Saravia, tripulante del Caoba especialista en meteorología que siempre nos da apoyo desde tierra, nos hacían llegar las novedades del avance de los frentes con que nos íbamos topando, como así también la situación de mareas y novedades de boyado del río Uruguay. A todos ellos nuestro agradecimiento. Porque su ayuda resultó fundamental a la hora de salir a cumplir un sueño. Habíamos estado preparando el derrotero y viendo posibles zonas de fondeo en nuestra marcha hacia Concepción. Y el mayor desafío era cómo seguir avanzando y haciendo noche sin amarrar en puertos uruguayos, debido a que por las restricciones impuestas por la pandemia, debíamos navegar, amarrar y fondear en aguas argentinas. Contábamos con un viejo y valiosísimo ejemplar de Rumbos Náuticos – Guía para la navegación recreativa – edición 2004/05 que publicó Bienvenidos a bordo / BAB – la revista náutica argentina oportunamente, pero del que no hay reedición. Por lo que si bien nos resultaba de gran utilidad para tener un panorama general del área que íbamos a recorrer, nos faltaba información actualizada… Por suerte nada mejor que esa tranquilidad de que da tejer redes y contar con el respaldo de colegas y nautas en el camino. Gracias a ello conocimos a quien ahora es un nuevo tripulante del Caoba: Jaime Irigoytía, entrerriano de Gualeguaychú y seguidor en redes de las andanzas del Caoba. Como estaba en su casa aislado por Covid y con tiempo suficiente para navegar on line, empezó a acompañarnos, ya que navegábamos con el localizador encendido. Nos contactó por redes y nos empezó a proporcionar solidariamente datos y yeites típicos de los locales que nos resultaron de gran ayuda para seguir, poniéndonos en contacto con amigos suyos que nos recibieron en Concepción y con quienes creamos lazos de amistad que ojalá se mantengan en el tiempo.
Si bien siempre navegamos con instrumental de comunicaciones típico de las embarcaciones a vela y motor, fuimos conectándonos bastante eficientemente con telefonía celular y datos, ya que en la zona hay torres de varias empresas que permiten no estar aislados.
El Uruguay, río de los pájaros, presenta dos zonas claramente distinguibles, ubicadas al sur y al norte de Gualeguaychú aproximadamente, ya que geológicamente las características son diferentes: desde Gualeguaychú hacia el sur el valle del río, mayormente en su margen oeste –o margen Argentina– se haya inundado permanentemente, con lo cual las terrazas aluviales de esta margen están sumergidas; de este modo el río se presenta extremadamente ancho, pero sólo tiene profundidad a lo largo de un canal más o menos estrecho que corresponde al valle o talweg. Además en este tramo se mantiene la influencia de las mareas. A partir de Gualeguaychú, y aguas arriba, esta característica de valle inundado desaparece, con lo cual el río se estrecha notablemente y aparecen entonces las playas de arena blanca de mayor o menor extensión dependiendo de la altura del río, que discurre entre islas mientras que el caudal y la altura del río depende de la apertura de las compuertas de la represa de Salto Grande, que se ubica aguas arriba. Pero hay algo que sólo estando cerca de la ROU se aprecia, desde ese punto de vista característico y que siempre sorprende y regocija. Son esos atardeceres intensos, de colores maravillosos, que en nuestro viaje explotaron en arco iris tras las lluvias de las tardes que duró nuestra travesía. Y que al anochecer se convertían en cielos estrellados reflejados en el agua de los arroyitos donde fondeamos (Boca del Vizcaíno por ejemplo). Tan hermoso como inolvidable.
A medida que avanzamos conocimos más nautas en vacaciones de cabotaje. De recorrida por el Caribe entrerriano disfrutando de paisajes amigables como su gente. Finalmente el martes 25/01/22, a la tardecita, fuimos recibidos en el Yacht Club Parque del Sur de Concepción del Uruguay, donde nos proporcionaron amarra de cortesía por una noche.
CONTINUARÁ…….
Etapas
1 – YCPM, Arroyo Sueco – Punta Gorda – Arroyo Sauce 19 al 22/01/2022
2 – Punta Gorda / Arroyo sauce – Concepción del Uruguay – 23 al 25/01/2022
3 – Concepción del Uruguay/Martín García – 26 al 29/01/2022
4 – Martín García/Dársena Norte-YCPM – 30/01/2022
