Australia ha vuelto a demostrar que es el equipo a batir tras imponerse a Gran Bretaña y a la recién llegada Canadá en la Gran Final de la Bermuda Sail Grand Prix presentada por Hamilton Princess.
Los bicampeones se impusieron a los británicos de Ben Ainslie y a los canadienses de Phil Robertson en una regata final impecable, tras una actuación constante en las cinco pruebas de la flota.
Una salida aletargada por parte de Gran Bretaña no hizo más que dar impulso a Australia y Canadá, que se lanzaron sobre la línea de salida. Slingsby, que lideró la regata desde el principio, demostró estar en condiciones de competir, virando en tándem con Canadá y bloqueando su viento.
Gran Bretaña, por su parte, navegó constantemente en el lado opuesto del campo de regatas, buscando más viento y logrando grandes ganancias. Pero con el controlador de vuelo Jason Waterhouse pilotando el barco más alto, Australia no hizo más que ampliar su ventaja al frente, sin dar oportunidades a Canadá o Gran Bretaña de tomar la delantera.
Australia navegó de forma rápida y limpia, consiguiendo una ventaja de 200 metros sobre Gran Bretaña en la última etapa y arrasando con una victoria aparentemente sin esfuerzo.
“Creo que está llegando a través de la confianza”, dijo un exultante Slingsby en la línea de meta. “Nos estamos convirtiendo en una especie de especialistas en el juego de los tres barcos”.
A pesar de quedar en tercera posición, el equipo canadiense debutó con mucha confianza y se apoyó en la experiencia del piloto Phil Robertson y del veterano de SailGP Chris Draper para conseguir una victoria y una regata consistente en las cinco pruebas de la flota.
Por su parte, la Gran Bretaña de Ainslie consiguió dos victorias en el primer día de regatas y ahora se sitúa en la segunda posición de la clasificación general.
En cuanto al resto de la flota, fue un fin de semana difícil para el equipo francés de Quentin Delapierre, que recibió la segunda bandera negra de la historia de SailGP tras casi colisionar con Gran Bretaña en la línea de salida de la quinta regata. Nueva Zelanda también tuvo una actuación irregular, consiguiendo una victoria en la quinta regata, seguida de un lánguido séptimo puesto en la última regata de la flota, lo que les dejó sextos en la general con 29 puntos.
La flota de F50 superrápidos, compuesta por nueve miembros, se reunirá de nuevo en la United States Sail Grand Prix de Chicago los días 18 y 19 de junio
