Quentin Mocudet, patrón del Maxi 6.50 n°1015, vio cómo su barco se convertía en humo ante sus ojos en La Turballe donde estaba haciendo pequeños arreglos.
Quentin Mocudet estaba pegando piezas y limpiando cabrestantes cuando una toalla de papel se incendió, y las llamas se propagaron rápidamente por los vapores del solvente.
Así lo relata “ El sábado 26 de noviembre estaba dando los últimos retoques a mi barco antes de retomar los entrenamientos: bricolaje, pegado de los compañeros al casco, limpieza de los winches con gasolina F. Cuando de repente un trozo de toalla de papel se incendia. Trato de asfixiarlo pero en cuestión de segundos los vapores de gasolina se encienden. La cabina queda envuelta en llamasy , apenas tengo tiempo para bajar del barco. Por suerte, no estoy herido y me salgo con dos pequeñas quemaduras en los tobillos. Todo sucedió tan rápido que ni siquiera sé cómo sucedió. Cuando bajé del bote, supe que no podíamos detener este incendio.”
